San Roque (Cádiz) emite notificaciones fantasma en el BOE

En los últimos meses, debido a diferencias en la interpretación de la Ley 39/2015 así como la Ley de firma electrónica por parte de la AEAT y la FNMyT, no podemos utilizar el certificado de persona jurídica, por lo que algunas administraciones están teniendo problemas para notificarnos. Aunque hemos dado varias alternativas, cuando éstas se agotan las administraciones vienen obligadas a publicar las notificaciones en el Tablón Edictal del BOE, como viene haciendo por ejemplo el Ayuntamiento de San Roque (Cádiz).

La publicación en el Tablón Edictal Único del BOE la vemos correcta, aunque no suelen publicar todo el contenido de la notificación pretendiendo que se asista personalmente a las administraciones, que en algún caso nos obligaría a hacer cientos de kilómetros. El mayor problema viene sin embargo cuando al notificar olvidan indicar a quién se dirigen, creando una especie de «notificaciones fantasma», que lógicamente carecen de validez y es lo que parece estar pasando en San Roque

Dado que aunque no podamos acceder a algunas sedes electrónicas dependiendo del criterio que quieran emplear (el Consejo de Transparencia o el Defensor del Pueblo han habilitado el acceso como persona física del representante, evitando el problema, mientras que el Ayuntamiento de San Roque no lo ha permitido) sí recibimos correos de aviso sobre notificaciones enviadas. Por ello días después, una vez cumplido el plazo, podemos revisar el BOE para ver la notificación de que se trate.

En este caso, haciendo una búsqueda inversa porque de otro modo sería imposible, hemos localizado 3 «publicaciones fantasma» del Ayuntamiento de San Roque que intuimos se dirigen a esta Asociación, por la coincidencia de una referencia de registro de salida, aunque no la podemos dar por válida al no tener la completa seguridad de ello.

Puestos en contacto con el Boletín Oficial del Estado nos indican que no pueden hacer nada al respecto porque publican las notificaciones tal como las reciben, por lo que si alguna administración olvida indicar a quién se dirigen no es posible detectar ese fallo ni mucho menos corregirlo, quedando ocultas para las búsquedas de los interesados.

Por este motivo rogamos a las administraciones públicas mayor cautela en las notificaciones, revisando que contienen todos los elementos esenciales para que los administrados puedan disponer de las máximas garantías.