El misterioso caso de multiplicación de las tarjetas azules

Hace una semana en San Roque, ayer en Palmones, hoy nuevamente en San Roque… cada vez hay más vehículos con «tarjeta azul» que estacionan en las plazas reservadas a personas con movilidad reducida de las que se bajan sin ningún problema y hasta saltan los obstáculos que tengan hasta llegar a su tienda favorita.

Para los que no conocen el tema, para tener «derecho» a una tarjeta de autorización para PMR (plazas de movilidad reducida) es necesario cumplir unos requisitos, recogidos en el anexo 3 del  Real Decreto 1971/1999, de 23 de diciembre, de procedimiento para el reconocimiento, declaración y calificación del grado de minusvalía. Es decir, no basta con que te den un porcentaje de discapacidad, si no que además debes presentar problemas para el desplazamiento. En concreto hay 3 posibilidades de que se conceda directamente o, si no cumple esos requisitos, debe obtener una puntuación mayor de 7 en 5 pruebas que también están recogidas claramente.Anexo 3

Por eso cuando vemos gente que utiliza habitualmente vehículos que estaciona en plazas reservadas para PMR y se baja de ellos sin ningún problema aparente de movilidad, incluso parece que superarían todos los test del citado Anexo, siempre queda la duda de cómo se vienen adjudicando estas tarjetas.

En algunos casos parece claro: la tarjeta es de un tercero y la usa quien le viene en gana. En otros no está tan claro, y lógicamente el ciudadano al que se la han concedido tiene todo su derecho a utilizarla, pero la cuestión está en saber por qué en algunos casos cuesta muchísimo (más de un año en algún caso conocido reciente grave) y en otros se entregan con tanta facilidad… Siempre cabe la duda de si la persona que la obtuvo se presentó el día de la revisión arrastrándose por el suelo y luego sufrió una súbita mejoría al salir.

En la imagen adjunta puede verse un vehículo, que portaba tarjeta de autorización para utilizar las PMR, del que se bajaron tres ciudadanas aparentemente a realizar sus compras sin ningún problema si hubieran tenido que aparcar más lejos…

Palmones PMR

 

Es de resaltar que, a diferencia de otros municipios, la Policía Local de Los Barrios no pone objeciones para comprobar hechos como estos. El posible uso fraudulento de tarjetas de autorización es más grave que el simple estacionamiento en zona para la que no se dispone de permiso.